VIDEOMENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCO
CON OCASIÓN DE SU INMINENTE VIAJE APOSTÓLICO A TAILANDIA
[19-23 de noviembre de 2019]

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Queridos amigos:

En la víspera de mi viaje apostólico a Tailandia, los saludo con todo afecto.

Sé que, como nación multiétnica y diversa que posee ricas tradiciones espirituales y culturales, Tailandia ha trabajado mucho para promover la armonía y la coexistencia pacífica, no solo entre su gente sino en toda la región del sudeste asiático. En este mundo que con demasiada frecuencia experimenta discordia, división, exclusión, este compromiso de forjar una unidad respetuosa de la dignidad de todo hombre, mujer y niño puede servir de inspiración para los esfuerzos que las personas de buena voluntad en todo el mundo llevan a cabo para promover un desarrollo grande, verdadero de nuestra familia humana en solidaridad, en justicia y viviendo en paz.

Durante mi viaje, tendré la oportunidad de reunirme con la comunidad católica de Tailandia para alentarlos en la fe y en el aporte que ellos hagan a toda la sociedad. Son tailandeses y deben trabajar por su patria. Espero también fortalecer los lazos de amistad que compartimos con numerosos hermanos y hermanas budistas que dan testimonio elocuente de los valores de la tolerancia y de la armonía que son tan características de vuestro pueblo. Confío en que mi visita contribuya a poner de relieve la importancia del diálogo interreligioso, el entendimiento mutuo y la cooperación fraterna, especialmente en el servicio a los pobres, a los más necesitados y en el servicio a la paz: en este momento necesitamos trabajar tanto por la paz.

Sé que muchas personas están trabajando para preparar mi visita, se lo agradezco de corazón. En estos días, los llevo a todos, queridos amigos, en mis oraciones. Pido por ustedes, por sus familias, por su patria; y por favor les pido que también recen por mí. Muchas gracias.