¡Queridos jóvenes!

He sabido que en el próximo mes de octubre se celebrará en el Colegio San Carlo de Milán el “Leadership Summit ” y deseo dirigir a vosotros y a todos los participantes mi saludo y mis mejores deseos, que acompaño con una breve reflexión.

En este tiempo marcado por graves crisis sociales y climáticas, junto a vuestros profesores y educadores os estáis interrogando sobre cómo contribuir al cambio del mundo. Esto es muy positivo. De hecho, es importante que tengáis grandes sueños: ¡también Dios los tiene! Y es importante encontrar adultos que no apaguen los sueños, sino que os ayuden a interpretarlos y cumplirlos. ¡Comparad siempre vuestros sueños con los de Dios!

Si después queréis vivir el cambio de protagonistas, os invito a descubrir la fascinación inagotable de la persona de Jesús: Él hace nuevas todas las cosas; Él revela una autoridad diferente de la que exhiben los poderosos de ayer y de hoy. La suya es una forma de transformar las situaciones que no abruma, sino que eleva, no obliga sino que libera. Jesús transforma al hombre desde dentro, también a cada uno de vosotros, para que podáis expresar vuestras mejores energías y los talentos que tenéis que hacer fructificar. Seguidle a Él con plena confianza, pensando en vuestro crecimiento no como un levantaros por encima de los demás, sino como un abajarse al servicio de los otros. El más grande es aquel que sabe inclinarse sobre quien ha caído y hacerse cargo un poco de sus pesos, con una ternura que es verdadera fuerza.

He visto que queréis ser protagonistas valorando de la mejor forma los cinco sentidos que Dios nos ha donado. Esto es sabio, porque la realidad es superior a las ideas y requiere apertura, atención, compasión, requiere una “sensibilidad” integral. Y permitidme recordaros que de esta sensibilidad forman parte también la que los maestros de sabiduría llaman los “sentidos espirituales”. Estos no se oponen a los psicofísicos, sino que les iluminan y les potencian. Os lo digo porque el vuestro es un instituto educativo católico, y “católico” quiere decir precisamente que tiene una visión abierta e integral de la persona humana, en todas sus dimensiones, la que la Sagrada Escritura nos revela y que Jesucristo ha realizado en plenitud.

Queridos estudiantes, ¡atesorad estas oportunidades que la escuela os ofrece! No hay que darlas por descontado. Muchos de vuestros coetáneos en el mundo, especialmente chicas, no tienen ni siquiera la posibilidad de estudiar. Comprometeos también por ellos, y luchad también por sus derechos. Porque la fe es «una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se transmite, para que todos conozcan, amen y profesen a Jesucristo, que es el Señor de la vida y de la historia» (Homilía en la misa de la  XXVIII  Jornada Mundial de la Juventud, Río de Janeiro, 28 de julio de 2013).

Os doy las gracias por vuestro compromiso. Os bendigo de corazón, a vuestros profesores y educadores y a vuestras familias. San Carlo y la Virgen María os ayuden a sentir la alegría del Evangelio y a tratar de encarnarlo en la vida. Por favor, no os olvidéis de rezar por mí.

Francisco

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L'Osservatore Romano, Edición semanal en lengua española, Año LX, número 42, Viernes, 20 de octubre de 2023, p. 3.